CELEBRACIÓN DE LA ASAMBLEA ANUAL DE AMIGOS DEL TEJO

La asociación berciana “A Morteira” fue la encargada de organizar este año la III ASAMBLEA ANUAL DE “AMIGOS DEL TEJO” en la escuela del Bosque de Pereda de Ancares.
Tras una excursión por los teixedales de Burbía tuvo lugar la asamblea, en la que se resalto el valor del Tejo como un claro indicador de la máxima calidad ambiental. “Sí el tejo está presente, el bosque está completo”. Es, además, uno de los organismos vivos más longevos, lo que le vincula directamente con lo más profundo de nuestra tradición y cultura. El tejo viaja en el tiempo y nos trae la cultura ancestral no escrita. Esta tradición se personaliza en los tejos situados junto a las iglesias, cementerios, casonas, etc., aunando patrimonio cultural, natural e histórico.
En la comarca del Bierzo todavía permanece una de las más valiosas representaciones de este tipo que hay en la peninsula. Desde el tejo de San Cristóbal, en quien se encarna, como en pocos sitios, el respeto y amor al árbol, hasta las notables tejedas del alto Burbia, Valle de Ancares, Fornela.

Los miembros de la asociación, venidos de muy distintos y distantes puntos de la península y Portugal, han podido apreciar sobre el terreno una importante regeneración natural en alguna de estas tejedas. Tan importante es conservar nuestros últimos ejemplares monumentales, como potenciar la regeneración natural de todos los bosques y en definitiva conservar este importante legado para generaciones futuras.
Tras la asamblea tuvo lugar el magosto popular, amenizado por la “Escola de gaitas de Villafranca del Bierzo” y como excelente postre, una muestra de diapositivas sobre el paisaje berciano del fotógrafo Isidro Cánoniga, y “Bosque de Tejos” del fotógrafo Luisma Gaztelu.
Las jornadas concluyeron al día siguiente con un recorrido por el valle de Ancares, y la plantación de un tejo, en la escuela de Pereda de Ancares, en homenaje a Bárbara Aru miembro de la asociación “amigos del tejo” que falleció en los Picos de Europa haciendo su trabajo en el bosque y también para continuar la tradición de plantar un tejo cuando se inaugura una casa, en este caso “La Escuela del Bosque” de Pereda.
La Asociación Amigos del tejo, donó cien tejos para que sean diseminados por todo el territorio berciano.

La Crónica 11/11/08
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